Ginebra, Suiza, 22 de mayo de 2018 (OPS/OMS)
Sr. Presidente, Delegaciones a ésta Honorable Asamblea:
El Salvador está impulsando la Salud Universal, término que resume un duro debate en la Región de Las Américas en el que la decisión fue no sólo hablar de cobertura universal si no también de acceso universal a la salud. La Salud Universal es la oportunidad que tienen millones de personas históricamente excluidas del derecho a la salud. Para ello, en El Salvador estamos rompiendo barreras económicas, geográficas, tecnológicas y culturales.
Desde el inicio de la Reforma de Salud en 2009, implantamos la gratuidad de los servicios, hemos duplicado el número de establecimientos del primer nivel de atención y hemos realizado una inversión sin precedentes en equipamiento de la red hospitalaria y del primer nivel de atención. Con el enfoque de la determinación social, hemos trabajado por el derecho y la protección social de la salud, propiciando un modelo de salud Familiar basado en la Atención Primaria de Salud integral, hemos aumentado la densidad de recursos humanos en las zonas rurales más lejanas y promovemos la participación social y comunitaria, así como las acciones intersectoriales las cuales son la base del modelo de salud urbana lanzado el año pasado. Sabemos que ha cambiado el contexto desde Alma Ata, pero no el sueño de la Salud Para Todos.
En coherencia con las estrategias de la Salud Universal, estamos trabajado por que nuestra población tenga garantizadas un conjunto de prestaciones integrales de acuerdo al curso de vida. Lo cual no significa “paquetes básicos de servicios”. Para ello ha sido fundamental el fortalecimiento de las instituciones públicas de Salud. Promovemos la Salud Universal a través de políticas, planes y las agendas de salud tanto a nivel nacional como a nivel sub regional en Centroamérica y República Dominicana. Observamos que nuestros objetivos, con sus particularidades, están en coherencia con el Treceavo Plan General de Trabajo de la OMS 2019 – 2023, y con la implementación de los ODS.
En la ruta a la Salud Universal enfrentamos retos importantes como es el aumento de las enfermedades no transmisibles y sus implicaciones.
En armonía con esta visión, menciono algunos logros puntuales: En cuanto al seguimiento a las Enfermedades crónicas contamos con un Plan Nacional de prevención y Atención a las Enfermedades No transmisibles. Lanzamos, el primer censo de peso y el cuarto censo de talla en escolares de primer grado; producto del cual, los Ministerios de Educación y Salud impulsamos “La normativa de tiendas y cafetines escolares saludables”, regulando aquellos productos que no contribuyan a una alimentación escolar saludable. También hemos lanzado el Plan estratégico nacional intersectorial para el abordaje integral del sobrepeso y obesidad 2017-2021.
Este año inició el funcionamiento del Centro Nacional de Radioterapia, que brinda servicios ambulatorios gratuitos, a pacientes con cáncer. Cubriendo así una deuda histórica.
En El Salvador, estamos ejecutando el proyecto: “Fortalecimiento de la capacidad nacional para la implementación del Convenio Marco del Control del Tabaco 2030”. El país continúa con la implementación de la estrategia Fin a la Tuberculosis y en la ruta hacia la eliminación de la Malaria, sin casos autóctonos reportados en 2017 y 2018. Seguimos con éxito en el control de las Arbovirosis y dentro de ello el seguimiento a las mujeres embarazadas para la detección de problemas congénitos.
Por otra párte, según la Evaluación de la Autoridad Reguladora Nacional de medicamentos (DNM), realizada por la OPS, hemos alcanzado el nivel III y aspiramos a alcanzar pronto, el nivel IV.
Sr. Presidente, por los principios de inclusión y universalidad, El Salvador reitera su posición de que Taiwán se mantenga como observador en las Asambleas Mundiales de Salud.
Finalmente, expreso mi agradecimiento a la Dra. Carissa Etienne y a la representación local de OPS/OMS, por su valioso acompañamiento en el abordaje de los principales problemas de salud en nuestro país.
Muchas Gracias.