San Salvador, 12 de diciembre de 2017. Primera vez que el Ministerio de Salud, MINSAL, es reconocido con 2 premios a las mejores prácticas, que otorga el Gobierno de El Salvador, mediante la Secretaría de Gobernabilidad y ES Calidad (oficina administradora del premio), el pasado 4 de diciembre, por lo que unió a los equipos ganadores de años anteriores para compartir sus experiencias.
El Premio Salvadoreño a la Calidad y el Reconocimiento a las mejores prácticas, son galardones creados por el gobierno con el fin de fomentan un Modelo para una Gestión de Excelencia, el cual ha sido diseñado con base en principios internacionalmente aceptados como inspiradores, validados con experiencias de éxito a nivel mundial y útiles para ayudar a quienes buscan una guía para el perfeccionamiento de sus procesos.
El Reconocimiento a las Mejores Prácticas, es una distinción creada para reconocer el trabajo de equipos gestores que desarrollan e implementan proyectos vinculados a la mejora de un servicio con resultados en beneficio de la población, contribuyendo al proceso de mejora continúa y que puede ser ejemplo para otras organizaciones.
El subsecretario de Gobernabilidad de la Presidencia, José A. Morales dijo: “la gestión de la calidad no es una opción para nosotros es una obligación, porque el Estado y los fines del Estado son brindar buenos servicios llevar salud, llevar educación, llevar bienestar a la población y eso lo tenemos que hacer con calidad, no hay otra forma de hacerlo, la calidad de la gestión pública se mide en función de la capacidad que tengamos de atender y satisfacer las necesidades de la población con prontitud, eficacia, calidad, con justicia y con equidad”.
El Viceministro Julio Robles Ticas felicitó a “los hospitales y a las redes que han ganado estos reconocimientos a las mejores prácticas, como MINSAL en un principio la Dra. Rodríguez y actualmente con mayor énfasis la Dra. Violeta Menjívar ha impulsado esto y no lo hacemos solo por competencia a nivel del premio nacional y de las mejores prácticas, sino que lo hacemos internamente presentando cada uno de los hospitales buenas prácticas, buenas prácticas para ir mejorando día a día en la prestación de los servicios de salud”.
El MINSAL ha postulado proyectos al premio desde el 2012, proyectos que han incidido positivamente en la atención en salud y a la fecha se ha ganado 5 galardones del Reconocimiento a las Mejores Prácticas: en 2012 el Hospital Nacional de Chalchuapa ganó el 1er. premio con el proyecto “Atención oportuna de la Mujer Gestante con trastornos hipertensivos del embarazo”, en 2013 el Hospital Nacional de Nueva Guadalupe “Fortaleciendo la Calidad de vida de la madre y del Recién Nacido, a través de la vía más segura de la atención del parto”.
En 2016 el Hospital Nacional Rosales ganó con el proyecto: “Centro de Cirugía ambulatoria” y este 2017 se postularon 5 proyectos y por 1ª. vez el MINSAL obtiene dos galardones de buenas prácticas con el Hospital Nacional de San Vicente “Implementación de la estrategia Código Rojo, para diagnóstico y manejo del choque hipovolémico por hemorragia post parto severa” y el Hospital Nacional de San Miguel “Reducción de las infecciones asociadas a la atención sanitaria en los neonatos atendidos en el Hospital”.
En el Hospital de San Vicente, el resultado obtenido en la implementación de la mejor práctica a lo largo de los tres años en el que se ha reducido a cero muertes maternas por hemorragias post parto severas, además ha representado un ahorro en la inversión de salud pública, reduciendo la referencia de pacientes críticas que requerían manejo en Unidad de Cuidados Intensivos en hospital de tercer nivel; y se adoptó como estrategia a nivel nacional en los 28 hospitales que cuentan con servicio de maternidad.
Mientras que en el Hospital de San Miguel, han mejorado la eficacia/eficiencia organizacional al implementar la mejor práctica en el servicio de neonatos, disminuyendo la letalidad por infecciones asociadas a la atención sanitaria de 0.45% a 0.2%. Se disminuyó la tasa anual de infecciones en neonatos de 5.5% (2012) a 0.8%% (2016), lo que significó una disminución en el promedio de días estancia del neonato con Infecciones Asociadas a la Atención Sanitaria (IAAS) de 7.6 a 5.4 días.